Santiago Torres
Chilpancingo, Gro., (Abril 24, 2020).- Es difícil tomar una decisión ante las medidas impuestas por la presencia del COVID-19, con lágrimas en los ojos y una preocupación por sus empleados, Javier Méndez, dueño de un salón de belleza, enfrenta el miedo por cerrar su negocio.
En lo que va de los últimos meses, y en los cuales han aumentado los casos y las medidas para prevenir los contagios por COVID-19, su negocio ha perdido más del 95 por ciento de su clientela.
Él lleva mucho tiempo trabajando en el sector de la belleza, y rodeado de cada uno de los tocadores que guarda los peines, tijeras y otros instrumentos que usaba a diario, cuenta lo triste que es ver su negocio vacío.
“Es doloroso, es triste ver mi negocio así, yo sé que esto no es culpa del gobierno, yo sé que esto nos está afectando a todos, pero duele tomar una decisión”, lamenta ante la posibilidad de cerrar lo que con tanto esfuerzo ha construido.
Solidario y empático con las demás personas, también muestra su preocupación hacia sus trabajadores, preguntándose ¿Qué van a hacer? ¿De qué van a vivir? ¿Qué ingreso van a tener? ¿Qué les voy a decir, que se acaba su trabajo?
Lamentablemente el cobro de agua, luz y otros pagos continúan llegando a sus manos, además no se le ha condonado la renta de su local, que es muy cara por ser en el Centro de Chilpancingo.
Aún con la situación que vive por el posible cierre de su negocio, conserva la esperanza de que esto pronto termine, sea pasajero y vuelva a seguir trabajando para llevar el sustento a su hogar.
Y pide la solidaridad de la ciudadanía, para apoyar con despensas para ser entregadas a las personas que más lo necesitan en estos momentos. Informes en avenida Álvarez #58 planta alta, frente al Hotel Plaza.