Zihuatanejo, Gro., (Julio 12, 2016).- El Centro de Zihuatanejo es sin lugar a dudas la zona más álgida en lo referente al caos en que se ha convertido el comercio en el municipio. Ya que la regulación de ambulantes y el reordenamiento de las calles no ha sido materia. Diariamente se observan fruterías establecidas invadiendo parte de las aceras.En tanto, la autoridad ajena al gobierno local que pudiera intervenir en la regulación del comercio en el puerto, al menos en lo referente a precios y calidad del servicio, es la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). Sin embargo, la Delegación Zihuatanejo carece de personal, al grado de que para este periodo vacacional solo se cuenta con 2 trabajadores para cubrir el destino de playa.Ciudadanos entrevistados al respecto, indicaron, por ejemplo, que la venta de carne, y otros tipos de alimentos traídos de fuera, mediante la utilización de camionetas prácticamente como locales semifijos, se ha mantenido, e incluso ha incrementado en algunas calles, tal es el caso de las que rodean a la primaria IMA, en las que además se expende ropa de segunda sin ninguna regulación sanitaria de por medio.La estrategia denominada jueves sin ambulantes, la cual era vista como un respiro por los vendedores debidamente establecidos, y como un desahogo vial para los conductores, ya no se aplica. Un ejemplo palpable es todo el frente de la clínica del Seguro Social y centrales de autobuses. La zona ha pasado a ser prácticamente un tianguis más.El comercio informal ha crecido sin regulación alguna, que las pocas áreas vedes que quedaban en colonias como Infonavit El Hujal, se han estado extinguiendo para dar paso a nuevos negocios.La problemática, incluso, le ha cobrado factura a zonas de reserva ecológica, tal es el caso del arroyo de la colonia El Limón. Sobre el cauce se siguen instalando enrramadas, cabañas y techos de lámina que son utilizados para la comercialización de todo tipo de mercancía, mientras que negocios establecidos cierran sus puertas.
