Baldemar GómezChilpancingo, Gro., (Junio 22, 2017).- Manuel Olivares Hernández, secretario general del Centro Regional de Defensa de los Derechos Humanos “José María Morelos y Pavón”, señaló que luchadores sociales y periodistas ya sabían desde hace poco más de dos años que la administración del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero invirtió 17 millones de pesos para espiar.Dijo que la finalidad siempre ha sido realizar una labor de anti insurgencia, así como de seguimiento y control de todas las comunicaciones de los dirigentes sociales, defensores de derechos humanos y de periodistas.Denunció que el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero invirtió más de 17 millones de pesos en la compra de un sistema de espionaje, para espiar a periodistas y dirigentes de organizaciones sociales y no gubernamentales, mismo que en lugar de monitorear y grabar todo lo relacionado con integrantes de la delincuencia organizada, lo mal usó y hoy día se están viendo las consecuencias, advirtió.Reveló que “la compra de este equipo o software para espiar a los luchadores sociales y periodistas, es algo que conocemos desde hace ya más de dos años, cuando se invirtieron más de 17 millones de pesos durante la administración del ex mandatario estatal, Ángel Aguirre Rivero. Ya que desde entonces nos dimos cuenta que la finalidad no era combatir a las bandas de delincuentes o narcotraficantes, sino que fue para realizar una labor de contrainsurgencia, de seguimiento y control de todas las comunicaciones”.Sostuvo que con dicho equipo se implementó en Guerrero una labor de contrainsurgencia, “de control de todas las comunicaciones de los líderes sociales, defensores de derechos humanos, y de trabajadores de los medios de comunicación”, reiteró y que es indignante el papel de Aguirre Rivero “que destinó tanto dinero solo para tener el control social sobre la población. Finalmente esos aparatos son utilizados para el control de la población, el chantaje, y el sometimiento de los que luchamos por los derechos humanos”.Consideró que “el espionaje fue con varias finalidades, principalmente en contra de quienes se atreven a denunciar, informar verídicamente de lo que sucede en Guerrero, y en el país. El problema es que con esos aparatos si se detecta que son “enemigos del Estado”, los pueden mandar asesinar, desaparecer o levantar”, indicó.Dijo que el hecho de que el gobierno del estado diga que desconoce el paradero de ese equipo de espionaje es “porque se sigue utilizando para el espionaje, y obviamente él no va a decir que lo encontraron”. “Con todos los señalamientos que hubo contra el ex gobernador Aguirre Rivero, y su sustituto Rogelio Ortega, en cuanto a desviación de recursos, es muy fácil hacer perdedizos esos aparatos, pero finalmente estamos convencidos que se siguen utilizando para espiar a los luchadores sociales, defensores de derechos humanos, y periodistas”, concluyó.