Baldemar GómezChilpancingo, Gro., (Diciembre 14, 2017).- Guillermo Reyes Vergara, integrante de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), dijo que su sector es víctima del pago de cuota, por parte del crimen organizado, en las distintas regiones del estado, “la delincuencia ha estado presente en nuestro sector; nos ha tocado más que otras empresas, la delincuencia obliga a dar la cuota”.En conferencia de prensa integrantes de la CMIC dijeron que en la entidad los encargados de ejecución de las obras públicas cobran a las constructoras un diezmo del costo total de la obra; por igual la delincuencia organizada los obliga a rentar maquinaria para que los dejen trabajar.Lamentó que el gobierno del estado asigna las obras a empresas foráneas y los alcaldes se han convertido en sus enemigos empresariales, debido que de la noche a la mañana se convierten en empresarios de la construcción, al crear su propia constructora, al ejecutar la obra pública de su municipio.Guillermo Reyes Vergara dijo que a en lo personal a él nunca le han pedido el diezmo, pero muchos constructores han señalado que le exigen el 10% a cambio de asignarles obras.Y a pesar de que el gobierno de Héctor Astudillo dio instrucciones de que las empresas locales se les asignaran obras, sin embargo no son incluidas bajo el argumento de que son microempresas, no cuentan con capital de trabajo y no son muy susceptibles del sistema de financiamiento, concluyó.
