Lidia CamarilloChilpancingo, Gro., (Julio 6, 2016).- Pese a que los 46 diputados locales de Guerrero son los representantes populares que menos desempeñan su trabajo, también son los menos transparentes del país, en cuanto a sus finanzas legislativas, calificó el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO).De acuerdo al Informe Legislativo 2016 presentado por el IMCO que analizó la composición, el manejo de recursos y el desempeño legislativo de los 32 congresos locales (31 congresos y una asamblea legislativa), refiere que los diputados cuya función es expresar, proteger los intereses y demandas de los ciudadanos, por parte de ellos no existe esa información de manera clara y completa sobre su ejercicio.Cabe señalar que el Poder Legislativo local cuenta con 46 diputados con un sueldo bruto mensual de 70 mil pesos, aunado a ello los viáticos y otras asignaciones, por lo que cada uno de ellos tiene para este 2016, cerca de 9 millones de pesos para su operatividad; cuando el año pasado (2015), en su desempeño solo presentaron 10 iniciativas, analizaron 52 más, las cuales fueron presentadas por el gobernador en turno y un promedio de 70 sesiones.A pesar de ser una obligación de transparencia, se encontró que no es posible conocer con certeza los sueldos totales, ya que se agregan compensaciones extraordinarias que los diputados reciben por desempeñar funciones de mando en las comisiones legislativas, ya que los congresos omiten la totalidad de lo percibido. Por ello refiere que por esa nula transparencia hay desconfianza de los ciudadanos frente a su Congreso, ya que solo 17 por ciento de los guerrerenses se siente representado.Y es que la Cámara local no publica en su página de internet su información contable, administrativa, ni presupuestaria, por ello encabeza los ejemplos de malas prácticas que incluye el reporte, porque no detalla cuánto del gasto en subsidios y subvenciones se aplica para ayudas sociales, pensiones y jubilaciones, donativos y transferencias, entre otros rubros. El informe destaca que los presupuestos de nuestros congresos son superiores a los presupuestos de las cámaras bajas de Japón, Canadá, Alemania, Colombia y Chile.