Zihuatanejo
Los mediadores de lectura podrían desaparecer del programa Paralibros
Eliuth Ríos EspinozaZihuatanejo, Gro., (Marzo 19, 2019).- Podrían desaparecer los mediadores de lectura capacitados por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) para atender los paralibros. El módulo Zihuatanejo es visitado por unas 10 personas al día.Se trata de una variante de las Salas de Lectura que operan en lugares donde el acceso al libro es limitado. Las estructuras simulan un parabús o caseta y se instalan en espacios abiertos: parques, museos, plazas, o centros de recreación y cultura.En Zihuatanejo el inmueble se ubica en la Plaza del Artista, sobre el Paseo del Pescador y Playa Principal.“Abre los días jueves, viernes y sábado. Entre 8 y 10 personas lo visitan al día”, comentó el mediador porteño José Antonio Urbina Bello.“Cuando hay autobuses turísticos incrementa la lectura ya que la gente del interior de la república es más asidua a esa actividad”, refirió.En el caso de la gente local, añadió el también escritor y compositor, como tiene la facilidad de llevarse el libro a su casa, alrededor de 12 lo hacen diariamente.El próximo 22 de marzo, adelantó, en Acapulco se definirá el futuro del programa. Urbina Bello consideró que los paralibros son el mecanismo adecuado.La propuesta de Paco Ignacio Taibo es que desaparezcan los mediadores, expresó, se están echando por la borda los módulos de información; hemos ido a Taxco, Tixtla, Iguala y Chilpancingo a capacitarnos.“Hemos logrado tener un diplomado con todos los cursos, eso al parecer lo están haciendo a un lado”, señaló el mediador de lectura.Piensan manejar las obras literarias sin candado, dijo, que el paralibros funcione solo, totalmente abierto sin quien esté al tanto de él.El trabajo del mediador es recomendar y fomentar la lectura, destacó Urbina Bello.En ocasiones la gente porque ve un libro que tiene dibujitos considera que la lectura va enfocada hacia los infantes, expuso.Pero al adentrarse al texto en realidad se trata de una obra dirigida al sector adulto, mencionó, por eso es bueno, y ahí es donde entran los mediadores.Recordar que a pesar de que el módulo Zihuatanejo cuenta con un mediador de lectura ha sufrido de vandalismo. Presenta imperfecciones.El escritor local comentó que atiende seguido a una familia con dos niños; se llevan hasta 12 libros en un viaje. Y recordó que trabajó durante cerca de 30 años como mesero y capitán en Camino Real, en Ixtapa; “se me da y aprendí a atender a la gente”.El paralibros cuenta con un acervo de 365 libros dirigidos a niños, jóvenes y adultos, la idea es que cada día del año se pueda elegir un libro diferente.Algunos de los servicios que se ofrecen en estos espacios de acceso libre y gratuito son: préstamo de libros, revistas y periódicos; credencialización; talleres y sesiones de lectura; presentación y firma de libros, entre otros.La vida útil de cada paralibros es de 10 años aproximadamente. En Guerrero el programa opera desde 2012.