Politica
Más de 20 niños han perdido la vida a manos de la delincuencia organizada en Guerrero
Rosario HernándezChilpancingo, Gro., (Julio 21, 2016).- Más de 20 niños en Guerrero han perdido la vida a manos de la delincuencia organizada, denunció la diputada Maricarmen Cabrera Lagunas.En tribuna, la legisladora exigió que el fiscal guerrerense Javier Olea Peláez investigue estos asesinatos y si no puede con el cargo que renuncie.Denunció y exigió justicia para Carlos Geovanni Tenorio, niño asesinado a manos del crimen organizado, el fin de semana en Chilapa de Álvarez, mientras atendía un tendajón familiar.Dijo que atendiendo el reclamo de la madre de este niño, dará puntual seguimiento al caso para dar justicia al asesinato y el de más de 20 infantes, quienes no han encontrado la sensibilidad en la Fiscalía del Estado “donde se les ha cerrado la puerta”.“Al igual que Carlos Geovanni, una veintena más de niños y niñas inocentes que han perdido la vida, en manos de la delincuencia (…) Poniéndome en el lugar de todas las madres, que están sumidas en el dolor, en la impotencia, donde todos los días claman justicia por la muerte de sus hijos, un grito de justicia y dolor que no ha encontrado eco en nuestras autoridades de justicia, donde sólo se han encontrado con un fiscal insensible, donde se les han cerrado las puertas”.Dijo que es injusto que la seguridad sólo alcance a los famosos y turistas, por lo que exigió firmeza para solicitar que si las autoridades de justicia no son competentes que se cambien por otras que sí tengan la sensibilidad y la disposición de trabajar para garantizar justicia.”El Gobierno del Estado, por medio de sus autoridades de justicia son las que deben ser garantes de darles una ciudad o una comunidad libre de violencia”.Exigió al fiscal general trabaje en procurar la justicia para todos los ciudadanos de Guerrero.“A dónde vamos a llegar en un estado donde la autoridad justifica su incapacidad, afirmando que las bandas delincuenciales no traen conflicto con el turismo, traen conflicto entre ellos, seguramente por eso para nuestras autoridades nada importa la muerte de un ‘desconocido’ niño de 12, 11, 6, ó 5 años”.