Opinion
MÉDULA
LA “DISFUNCIÓN PÚBLICA”
Jesús Lépez Ochoa
Aunque usted no lo crea apenas el 6 por ciento de las irregularidades detectadas en la cuenta pública de 2019 al gobierno federal, estados y municipios se deben a desvíos de recursos derivados de pagos realizados sin contar con los entregables correspondientes, y un 2 por ciento a desvíos de recursos financieros, humanos o materiales para fines no previstos en la normativa aplicable.
La principal problemática identificada en esa interminable danza de los millones que unas cuantas veces al año la Auditoría Superior de la Federación nos deja ver en la marquesina de las ocho columnas y horarios estelares es, en un 63 por ciento, “a fallas o errores en la gestión administrativa del ente auditado”, y en un 26 por ciento el “incumplimiento de metas y objetivos de fondos, programas o políticas públicas”.
Lo anterior según cuestionarios aplicados por la ASF a sus auditores.
Ojo, esto no quiere decir que los entes fiscalizados sean todos inocentes aves que atraviesan por el dorado lago del presupuesto sin que se les pegue nada en su plumaje. Tampoco que sean todos unos pájaros de cuenta. Mucho menos que los millones de pesos que suelen desviarse o con los que se daña al patrimonio de la nación no sean importantes.
Si no que las principales problemáticas identificadas por los auditores tienen que ver desde una acción fuera de norma, una omisión, hasta la ejecución de programas o políticas públicas cuyas deficiencias de diseño impiden dar cumplimiento a las normas. Y la deficiencia misma con que suelen estar hechas las normas.
Pero el contexto institucional en el que encajan esas deficiencias en el diseño, planeación e implementación de programas y políticas públicas no es la única causa-raíz de esta problemática que se combina también con las decisiones personales, sobre todo, con la discrecionalidad de los funcionarios para tomarlas y que tienen que ver con controles y planeaciones inadecuados, así con una coordinación interinstitucional inadecuada con otras dependencias involucradas, entre otras cosas.
El botón de muestra lo puso la ASF en otro informe, exclusivamente sobre el gobierno federal, y es nada menos que la Secretaría de la Función Pública a cargo de Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, donde las irregularidades van desde negarle el acceso a la información a los auditores hasta la baja investigación de evolución patrimonial de apenas 92 casos cuando cuenta con un campo de acción de 575 mil 834 declaraciones presentadas por los funcionarios ese año.
También, y acá está el hilo conductor hacia las causas-raíz de las problemáticas identificadas por los auditores, que pese al incremento de plazas sólo el 1 por ciento de los contratados pertenece al Servicio Profesional de Carrera que la Función Pública tiene entre sus funciones impulsar.
Así las cosas, ¿cómo mejorar las deficiencias en la planeación y ejecución de programas y políticas públicas con apego a las normas si la Función Pública menosprecia el Servicio Profesional de Carrera que es justamente para eso?
Y mejor ni hablemos de la Matriz de Indicadores para Resultados del programa presupuestario de la Secretaría a cargo de doña Irma Eréndira a la que la ASF consideró inútil, en un muy duro informe sobre las deficiencias encontradas en la “Disfunción Pública”.
#ElTonYelSon
¿Qué quiso decir Mario Moreno Arcos con eso de que “el PRD va a tener gobernador, y un gobernador del PRD”? Ese fue el primer compromiso, con énfasis y todo, que expresó ante dirigentes y militantes del PRD que asumieron al priísta como su candidato común, pero también, ante un Evodio Velázquez Aguirre que asumió su derrota y se comprometió a no detenerse.
La unidad basada en un pacto de alternancia se lee entre líneas en esa parte de su discurso. Aunque impulse una plataforma conjunta y un gobierno de coalición como el sábado se dijo, Mario Moreno es priísta y no podría ser un gobernador “del PRD”, en todo caso lo sería de la alianza PRI-PRD que para fines de contra campaña sus competidores dirán que es lo mismo, e incluso algunos priístas antialiancistas, que también los hay.
Por eso es importante sí, que cuide que sus aliados amarillos no sientan vulnerada su identidad partidista como a todas luces intentó hacerse en el evento en el que hubo vivas a México, a Guerrero, al PRD y ninguno al PRI. Pero que también sus compañeros tricolores sigan identificándose con él y viéndolo con uno de los suyos.
Mario Moreno tiene una gran oportunidad de remontar y vencer a un adversario que no supera sus conflictos internos y el escarnio internacional. Pero ambas estructuras serán igualmente decisivas para el resultado que obtenga en esta elección y debe tener mucho cuidado de no herir susceptibilidades.
#Revolcadero
Y en la intentona de un externo a MORENA de quitar a Félix Salgado como candidato de ese partido para ponerse él, ya circula una encuesta en la que, obvia y mágicamente, la gente quiere que sea él quien ocupe la candidatura al gobierno de Guerrero. La única mujer a la que se incluye y con muy bajo resultado es Adela Román Ocampo. Los adalides de la mujer construyen una narrativa misógina para que a final de cuentas, el candidato sea varón… y propietario. ¿Suena igual a pacto patriarcal no?