Alejandro Alvarado GonzálezZihuatanejo, Gro., (Mayo 1, 2019).- A lo largo del cauce del arroyo de San Miguelito, lo mismo que un segundo río que cruza por varias colonias de la comunidad en El Coacoyul, proliferan alrededor de una docena de basureros a cielo abierto con toda clase de desperdicios, algunos son quemados por los propios habitantes y una gran cantidad termina contaminando la laguna y el mar.El señor Jaime Mendoza Martínez, residente de la colonia Aeropuerto, manifestó que él siempre está dispuesto a colaborar con sus vecinos en la limpieza, sin embargo, es una tarea permanente porque la basura se genera río arriba desde la comunidad de San Miguelito y en toda la zona suburbana no cuentan con el servicio regular de recolección por parte del gobierno municipal de Zihuatanejo. Con dicho argumento es que pueden observarse diversos basureros clandestinos con desperdicios de plumas de pollo, huesos de animales, bolsas y plásticos de todo tipo, entre otros residuos que con frecuencia los mismos habitantes de las colonias de la periferia se encargan de quemar y con ello incrementan los problemas de contaminación ambiental.Dijo el entrevistado que esperan contar con el apoyo de las autoridades de la comunidad y del municipio para llevar a cabo una campaña intensiva de limpieza a lo largo del cauce de los arroyos, antes de iniciar la temporada de lluvias, pues afirmó que hasta 20 toneladas de basura son arrastradas directamente hacia la laguna y el mar; también reconoce que la medida únicamente funciona por un breve tiempo, ya que ante la falta del servicio de recolección en unos quince días vuelven a surgir los mismos basureros a cielo abierto. Agregó que en ocasiones los vecinos han prendido fuego a la basura, “porque el carro no viene, aquí no tenemos recolección”, práctica que admite no es recomendable, por lo que sugirió la necesidad “de llamarle la atención al pueblo, de Miguelito, del Aeropuerto, y personas que haya cerca del arroyo, arriba del puente también hay unas familias y todo va a dar al arroyo, donde está el motel, todo va al mar… qué hay que hacer, juntarlas en bolsas y que venga el carro”, finalizó.